Con la llegada del calor, no hay quien se resista a salir a las playas y piscinas para refrescarse y conseguir ganar esa vitamina D esencial para nuestros huesos y sistema inmunológico y que tanto nos ha faltado los meses de invierno. No obstante, y como ya nos han avisado los especialistas, la constante exposición ante el sol puede causar efectos extremadamente negativos no solo fomentando el envejecimiento de nuestra piel, sino provocando graves problemas de salud en nuestro organismo.
Ante ello, la constante hidratación de nuestro cuerpo previamente a ser expuesto a los rayos del sol es fundamental para sobrevivir esta nueva temporada sin tener que lamentarnos por las quemaduras ocasionadas por el mismo. ¡Sigue leyendo!