El cuidado de la estética facial es esencial no sólo por razones estéticas, sino también por su impacto en la salud y el bienestar general. La piel del rostro es una de las áreas más expuestas a factores dañinos como la radiación solar, la contaminación o el estrés, lo que puede llevar a problemas como manchas, arrugas, acné y flacidez.