Ocho de la mañana se planta delante del armario, no tiene tiempo para pensar, coge el vestido negro, ¡llega tarde al trabajo!. Diez de la noche, ha quedado con alguien, “¿qué me pongo?”-susurra-, el vestido negro. Los LBD son un gran acierto en cualquier momento.
Foto: @lovelypepa en Instagram