Aunque a los 25 años comienza la pérdida de colágeno y elastina, esto no empieza a hacerse notar hasta la treintena. Por último, a los 40, los contornos comienzan a desdibujarse. Este envejecimiento de la piel viene dado por diversos motivos. Puede suceder por factores imparables, como la genética o el sexo, pero también por otros que dependen de nuestro estilo de vida, la relajación o los niveles hormonales. Como ya comentamos en uno de nuestros últimos posts, la exposición solar también es un factor importante a tener en cuenta. El doctor Ángel Martín ha creado FaceUp con una tecnología revolucionaria para frenar el envejecimiento de la piel.
Cuando las células se degradan, se pierde ácido hialurónico, colágeno y elastina, disminuye la vascularización, el hueso pierde densidad, disminuye el tejido graso y la consecuencia más evidente es la pérdida de volumen, proporción, equilibrio y simetría del rostro a causa de la gravedad. Esto se aprecia en un rostro caído y triste, con menos firmeza.
El Dr. Ángel Martín tiene más de treinta años de experiencia en los tratamientos y el cuidado de la piel. Él es el creador de FaceUp, un tratamiento que ayuda a retrasar y revertir los efectos del envejecimiento y consigue ‘prevenir, reparar y mejorar la flacidez gravitacional’. Con esto se consigue un efecto lifting sin necesidad de cirugía, gracias al ácido hialurónico.
“Es un tratamiento personalizado a la medida de cada paciente, con el objetivo de rejuvenecer el rostro recuperando los ángulos, los volúmenes y la densidad propios de un rostro joven, con unos resultados totalmente naturales”
A pesar de la innovación de este maravilloso tratamiento, el doctor Martín no duda en alertar sobre lo importante que es una buena prevención: “la prevención es la mejor arma contra el envejecimiento, los resultados de los tratamientos médico-estéticos son mejores y más duraderos si se lleva un estilo de vida saludable, que abarca una alimentación sana y equilibrada, evitar todo lo que se pueda el sedentarismo, realizar ejercicio físico de forma habitual y evitar el estrés, sumamente dañino para nuestra piel”.
FaceUp es un tratamiento de una sola sesión que tiene una duración de 30 minutos y cuyos resultados son visibles durante más de un año en el rostro. Combina tres elementos clave a la hora de revertir los efectos del envejecimiento facial:
Ácido hialurónico para dar volumen
Se inyecta ácido hialurónico reticulado que tiene una consistencia similar a la del tejido para hidratar y dar volumen, el efecto es inmediato y dura más.
“Inyecto el ácido hialurónico a nivel del periostio en la región malar, en el cigomático y en el ángulo mandibular, de esta manera consigo dar el volumen que se ha perdido a causa de la falta de colágeno y elastina”, explica el doctor Martín. Los beneficios del ácido hialurónico permanecen desde el año a los 15 meses.
Hilos espiculados para tensar
Los hilos espiculados aportan tensión, generan colágeno y fibroblastos. Se colocan con cánulas y se insertan en la capa SMAS, para reposicionar el plano profundo de la dermis y conseguir resultados naturales. Es un procedimiento rápido e indoloro.
En los casos de mayor flacidez, el doctor Martín coloca tres hilos espiculados en el arco mandibular, en los pómulos y en el arco cigomático para elevar y tensionar las estructuras faciales consiguiendo recuperar la ‘V’ que dibuja el óvalo facial en su juventud. El organismo reabsorbe los hilos entre los 10 y los 14 meses, pero los resultados se dilatan hasta los 18 ó 20 meses. Los efectos son progresivos y naturales y comienzan a apreciarse a partir del mes o mes y medio de la colocación de los hilos.
Hilos monofilamento por último
Los hilos tensores monofilamento son hilos suspensorios de Polidioxanona (PDO), totalmente compatibles, reabsorbibles, seguros y con resultados duraderos. Rejuvenecen desde dentro hacia afuera, creando tejido de soporte de forma natural por la producción de colágeno y fibroblastos alrededor del hilo insertado, que tensan y redensifican la piel. El procedimiento es sencillo, rápido, indoloro, y los hilos no se detectan ni a la palpación ni a la vista.
El cirujano estético explica como es la intervención: “Estos hilos se insertan con una aguja muy fina, los coloco en la región central del rostro creando un mallaje para estimular la producción de colágeno y fibroblastos, se crea tejido de soporte de forma natural y se tensa y redensifica la piel. El número de hilos irá en función del grado de flacidez que presente la paciente”.
Y además:
Me apasiona el mundo del maquillaje, el fitness, la moda y el periodismo, un oficio que me permite conocer las diferentes perspectivas que puede haber sobre un mismo tema, porque no hay una visión única. Un lugar, Roma. Un libro, La Chica del Tren.