Mejora tu cuerpo y tu mente: Los increíbles beneficios de la natación

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No es ningún secreto que la natación tiene innumerables beneficios para nuestra salud. Es uno de los pocos ejercicios que es capaz de potenciar la fuerza, la resistencia y la flexibilidad al mismo tiempo, pero que además por realizar el simple de hecho de inmersión nos proporcionará una gran relajación músculo esquelética.

“Lo más importante es cuando al adentrarnos en el silencio del mar o piscina desconectamos del mundo terrestre. Esa relación que estableces con el agua, al nadar, bucear, o sencillamente flotar, te da la oportunidad de parar por un momento y abandonar los pensamientos que conducen a las preocupaciones” 

Ángeles Linde, licenciada en INEF

Mentalmente es el aliado perfecto para ayudar a relajarnos de las tensiones, generar estados de animo positivos y dejar la “mente en blanco”.

Este deporte es súper beneficioso para aquellas personas que necesitan ponerse en forma y tienen limitada su movilidad ya que dentro del agua el peso de una persona se reduce significativamente y pudiendo llegar a ser el 10% de su peso normal. Por lo que está especialmente recomendado para las embarazadas, para los sufridores de artritis y los que padecen problemas de espalda y de peso.

Cabe señalar que además todas aquellas personas que sufran de afecciones pulmonares también podrán respirar con más facilidad debido a que el ambiente en una piscina generalmente es más húmedo.

¿Necesitas más razones? 

Numeramos detalladamente más beneficios de practicar este deporte para que te animes a intentarlo.

Las articulaciones y los huesos se desgastan menos

Debido a que pasamos la totalidad del tiempo dentro del agua, nuestro cuerpo no tiene que sufrir el impacto sobre las superficies duras a las que se enfrenta cuando se realizan otros deportes. Por lo que nuestras articulaciones y huesos se preservan mejor.

Quema grasas definitivo 

Está demostrado que con la natación se pueden quemar entre 500 y 600 calorías por hora, dependiendo de la intensidad con la que se practique. Es muy común incorporar este deporte en rutinas de personas que comienzan a perder peso.

Aumento de la flexibilidad 

Como comentábamos al inicio, la natación hace que utilicemos la mayoría de los músculos del cuerpo, sobretodo los de la espalda, pasando además por el tronco y la cabeza. Esto hará que nuestras articulaciones estén mas flexibles y los músculos se tonifiquen y fortalezcan con facilidad.

Beneficios cardiorrespiratorios

Ayuda a nuestra circulación disminuyendo la frecuencia cardiaca. Mejora el consumo de oxígeno hasta un 10% y el corazón puede impulsar la sangre hasta un 18% más.

Disminuye la retención de líquidos 

Favorece la circulación sanguínea y el drenaje. La misma presión que ejerce el agua al sumergirnos y el movimiento propio del agua, nos ayuda a sentirnos más ligeros.

Modalidades de la natación ¿qué ejercita específicamente tu cuerpo? Te lo contamos

Crol

Ejercitamos los músculos dorsal ancho, pectoral, deltoides, tríceps, bíceps, redondo mayor y trapecio. Secundariamente ejercitamos además abdominales, glúteos, intercostales y cuádriceps. 

Quema unas 250 calorías en 20 minutos.

Espalda

Trabaja músculos similares al crol aunque cambia el sentido de movimiento de los brazos. La técnica de espalda fortalece los músculos de la espalda, pectorales, bíceps y tríceps. Las piernas trabajan los isquiotibiales y, en menor medida, gemelos y músculos del pie.

Quema 250 calorías en 20 minutos.

Braza

Es 50% piernas, 50% brazos. Trabajarás fundamentalmente los pectorales, bíceps, dorsales, tríceps, deltoides, trapecio y romboides. En las piernas glúteos, cuádriceps, isquios y gemelos. 

Quema 360 calorías en 20 minutos.

Mariposa 

Es la modalidad más dura y la que mas calorías quema por excelencia. Se entiende como una variación del estilo braza donde se potencian los bíceps, tríceps, dorsal ancho, pectoral, redondo mayor, deltoides, trapecio, pectoral, cuádriceps, glúteo mayor, tibial, gemelo, recto interno, aductor y suelo pélvico.

Quema más de 400 calorías en 20 minutos.

Si finalmente optas por practicar este deporte y deseas potenciar sus beneficios es conveniente que sepas que debes empezar de manera suave y no intentar batir récords de velocidad o resistencia si no estás muy en forma. Al cabo de una semana podrás ir aumentando el tiempo que pases practicándolo. Y ¡ojo! La natación no tiene como resultado la fortaleza de los huesos por lo que es recomendable alterar ejercicios como andar, correr o otro ejercicio de suelo con lo que mantendrás e incrementarás tu masa ósea.

¡Anímate!

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