Prometía ser uno de los desfiles más divertidos de esta 63º edición de MBFWM y no ha defraudado. Tras 30 años mostrando al público algo más que simples colecciones, Ágatha Ruíz de la Prada vuelve a enseñar en cada look una forma de expresión artística.
Los trabajos de la madrileña siempre se han caracterizado por un concepto rupturista y, sobre todo, personal. Un universo formado a base de colores vivos, geometrías y un lenguaje simbólico con el que ha conseguido crear su propio sello de identidad, ese que tanto la distingue del resto y la hace tan especial.
Moda y creatividad se dan cita en la nueva colección otoño-invierno 2016/17, una temporada que viene acompañada de prendas muy cómodas que podrás lucir tanto de día como de noche añadiendo vestidos impregandos de vitales estampados o faldas mini metalizadas.
Ágatha Ruíz de la Prada retrata a una mujer con energía y picardía. La próxima temporada el espíritu desenfadado de los años 70’s se entremezcla con la odisea ‘agathista’ espacial, en homenaje a David Bowie. Las propuestas nos muestran una visión refrescante y coqueta que experimenta con telas inesperadas e inconfundibles iconos de la marca española. Colores como el naranja, el morado o el azul van a sorprendernos en esta primera jornada de MBFWM.
La diseñadora escoge los materiales más confortables para que luzcas tu mejor look durante la temporada otoño-invierno 2016/17. Todo ello aderezado con texturas impresionantes aderezadas con corazones, flores o prints galácticos.
Aunque esta colección se adapta a la comodidad y accesibilidad, no deja a un lado el lujo de los materiales de calidad y las costuras exquisitas. Diseños confeccionados en algodón, lana o tricot formarán parte de nuestros looks gracias a prendas ponibles.
No es ningún secreto que a Ágatha Ruíz de la Prada le gusta experimentar con cada una de sus colecciones, un juego en el que todo combina con todo: tejidos lisos con estampados, color con color…
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