Úrsula Corberó soñaba desde su infancia con pisar la alfombra de los Premios Goya, un sueño que se hizo realidad el pasado sábado.
“Lo viví como algo muy emocionante, con muchísima ilusión. El arte y el glamour eran los protagonistas de la noche y yo me sentía en una nube estando ahí presente”, comenta la actriz en su blog para la revista Glamour.
La elección del vestido perfecto es más complicada de lo que parece. Está claro que es imposible gustar a todo el mundo y Úrsula Corberó quería deslumbrar en su primera vez disfrutando de este acontecimiento tan importante para el mundo del cine.
Por ello, escogió un modelo de la diseñadora Teresa Helbig, en el que la feminidad y sofisticación se plasman en cada uno de los detalles de este vestido que encandiló a muchos.
Antes de nada, hay que comenzar a cuidar la piel para que resista hidratada y saludable durante un largo evento. “Fui a Tacha Beauty a disfrutar del tratamiento especial DIAMOND ROSE de @naturabisse para la alfombra roja. ALUCINÉ”, comenta divertida.
Los complementos son igual de importantes que el modelito. Finalmente, los elegidos fueron unas sandalias de tacón de Yves Saint Laurent, un clutch nude de Mascaró y unos pendientes de oro rosa de Cartier.
“En cuanto al maquillaje Iván me trabajó mucho la piel con diferentes bases para conseguir la textura perfecta. Me marcó el ojo con bronces y negros para darle mucha fuerza a la mirada y dejamos un rubor amelocotonado para aportar frescura. En cuanto al labio pusimos un frambuesa mezclado con cacao, muy natural. La coleta llevaba unas ondas texturizadas con un efecto surfero y una coronilla con un poco de volumen para favorecer el rostro. El punto sofisticado lo aportó el flequillo, bien tirante”, explica.
Y este fue el resultado:
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