La llegada de mayo ha cambiado el temporal completamente. Tras los numerosos chubascos y vendavales por los que atravesamos semanas atrás, por fin ha salido el sol y con más fuerza que nunca.
Es hora de hacer el cambio de armario, quitar los nórdicos y cambiar las comidas calientes por otras más frescas como las dos ideas de ensaladas que te mostramos aquí.
Ambos platos tienen base andaluza, tanto el remojón granadino como la versión del salmorejo cordobés que no dejará indiferente a nadie.
Remojón granadino
El remojón granadino es un plato de origen árabe muy popular no solo en Granada, sino también en las provincias de Almería y Jaén.
Para llevarlo a cabo necesitamos:
- 2 huevos
- 250 g de bacalao desalado y desmigado
- 2 naranjas grandes
- Media cebolla pequeña
- Aceitunas negras
- Sal
- Pimienta
- Aceite de oliva virgen extra
Elaboración:
Lo primero que haremos será pelar las naranjas, cortarlas y ponerlas de forma bonita en un plato; sobre estas colocaremos los trozos de cebolla fresca y el bacalao desmigado previamente cocinado en la sartén. Después colocaremos las aceitunas negras enteras, o laminadas si lo prefieren, y por último el huevo duro troceado que habremos cocido alrededor de unos 10 min si prefieres la yema hecha, o unos 6, si te gusta líquida. Finalmente aliñamos con sal, pimienta y aceite de oliva y ya tenemos nuestro remojón ‘granaino’.
Ensalada de salmorejo, ventresca y pimiento
No creerás el sabor tan potente que tiene esta ensalada tan sencilla, así que siéntate y toma nota.
Ingredientes para el salmorejo:
- 350 g de tomates pera maduros
- 1 diente de ajo
- 100 g de miga de pan
- 100 g de aceite de oliva virgen extra
- 25 g de vinagre de jerez
- 1 cucharadita de sal
Ingredientes para la presentación:
- 4 pimientos rojos en conserva
- 1 lata de ventresca de atún en aceite
- 1 aguacate cortado en láminas
Preparación:
Coge tu batidora o robot de cocina y coloca los tomates, el ajo y tritura. A continuación cuela la mezcla y guarda el líquido que es lo que vamos a necesitar para la receta.
Pon el líquido en el vaso batidor junto al resto de ingredientes (la miga de pan, el aceite, el vinagre y la sal) y vuelve a triturar. Viértelo en un recipiente y déjalo reposar en la nevera unos 30 minutos.
Cuando nuestro salmorejo esté lo suficientemente frío, lo extendemos sobre un plato llano; colocamos los pimientos en tiras sobre este, las láminas de ventresca junto al aguacate laminado, un poco de AOVE por encima… et voilà! ya tienes un platazo con un sabor increíble en menos de 15 minutos.
Periodista. Ambientada en el Nueva York de los 70 y la España de los 80. Viviendo ‘el sueño de mi vida’ a lo Jenna Rink.