Empieza el segundo día de desfiles en Mercedes Benz Fashion Week Madrid y lo hace con un desfile compartido por dos diseñadores noveles que han recibido una gran ovación del público. Moisés Nieto y Leandro Cano daban el pistoletazo de salida a esta segunda jornada con la presentación de sus propuestas para el próximo otoño invierno.
Multitud de sillas apiladas sobre un fondo rojo que nos recordaban a la sangre y la tradición que reflejara Federico García Lorca en su obra “La Casa de Bernarda Alba”. Moisés Nieto ha brindado un espectáculo sobre la pasarelaamenizada con música que podía hacernos sentir inmersos en la semana santa más castiza de la España profunda
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Sobre la pasarela, dualidad, no era una sino dos las modelos que presentaban los modelos. Modelos que, como si de un espejo se tratara se reproducían en negro y color, como la sombra de la tradición que perseguía a las protagonistas de la obra
.Los tejidos clásicos se reinventan con acabados innovadores como el tweed plastificado, la organza metalizada o el algodón con lurex. Los rojos vivos, amarillos, el color vino, azules eléctricos o dorados se combinan con el negro para contrarrestar la sobriedad del luto. Maravillosa inspiración y representación la de Moisés Nieto sobre la pasarela, que nos lleva al más puro Melodrama a través de sus prendas.
Luke Leandrocano con su Camino nos introducía en la mismísima naturaleza, gracias al trino de los pájaros que ambientaban el inicio del desfile. Los paisajes andaluces han sido la inspiración del diseñador que toma una perspecvtiva bucólica para presentarnos a la mujer de la próxima temporada.
Con una gama de color del todo naturista como el azul noche, el mostaza, vino, verde o beige nos transportan a la mísmisima primavera en la estación invernal. Los materiales como el pelo, cuero o la lana están presentes en toda la colección y nos brindan prendas que aúnan tradición y modernidad.
Bordados, aplicaciones y estampados se convierten en el acabado perfecto a una colección que ha levantado al público en una increíble ovación.