Los consejos definitivos para el cuidado de la piel

| |

Crear una rutina de cuidado es la mejor inversión que puedes hacer

A la piel hay que darle más cuidados. Es la que nos protege de todos los agentes externos y en determinadas zonas como la cara o el cuello es ciertamente más sensible. Hay algunos tips que hemos de tener en cuenta para que luzca joven y saludable.

Laneige tiene todo lo necesario para limpiar, exfoliar e hidratar el rostro. Ahí la piel es muy fina y tienden a formarse arrugas muy profundas. Realizar algunos estiramientos y evitar ciertas costumbres para sortear las arrugas es otra forma complementaria de cuidarse.

La prevención no es solo necesaria sino incluso efectiva. No hay que descuidar una rutina de cuidado de la piel. La crema hidratante tiene que formar parte de nuestra vida como el acto de comer. Laneige tiene algunas opciones water bank que ayudan a la piel a recuperar su luminosidad. Un consejo: procura aplicarla masajeando suavemente en pequeños círculos en dirección contraria al sentido de la gravedad. Y no olvides realizar la misma operación cada día antes de ir a dormir con una crema de noche, preferiblemente antiarrugas. Por la noche se produce un efecto de regeneración natural que hay que aprovechar con una pequeña ayudita.

Hay que exfoliar la piel una vez por semana. El exfoliante no debe ser demasiado abrasivo. La piel del rostro y el cuello son sensibles y es mejor utilizar productos delicados y de calidad. La exfoliación regenera las células y los tejidos se muestran más relajados.

La protección solar incluso en los meses invernales es otra cuestión vital para nuestra piel. La reiterada exposición provoca a nivel estético como mínimo arrugas; además de manchas y otras secuelas.

Al llegar a casa hay que limpiar la piel de cualquier resto de maquillaje, sudor o bacterias del exterior y tonificarla. La limpieza es básica porque si no se aplica un producto sobre una piel perfectamente limpia, probablemente no surta efecto.

Dar margen suficiente

No podemos pretender que una crema nos haga efecto en una semana. Eso sólo genera ansiedad y desconfianza hacia productos que pueden ser muy efectivos si se es constante. Si no somos pacientes y cambiamos de tratamiento rápido, terminamos estresando a la piel que no acaba de hacerse a un principio activo, impidiendo así que pueda cumplir con su función. Lo normal debe ser esperar algo más de un mes para ver realmente los efectos de un producto.

La crema hidratante tiene que formar parte de nuestra vida

Soluciones para mantenimiento general o específico

La clave está en la constancia, en crear una rutina de cuidado diario que siga unos pasos básicos de limpieza e hidratación. Además hay que saber elegir el producto que realmente es útil para cada persona. Más allá de buscar una crema o cualquier cosmético en general en función de la edad, a lo que hay que prestar atención es a las necesidades de cada tipo de piel.

No hay que comprar un producto por su packaging que nos entra por los ojos o porque se trate de una marca de moda. En cuidado facial hay que invertir un poco más, informarse bien y utilizar productos de alta calidad. El tiempo te dará la razón.

Prestar atención a nuestra postura

El acto de doblar el cuello constantemente cuando trabajamos con el ordenador, hablamos por teléfono, etc. pasa factura no sólo a la musculatura sino también a la piel. Entre la cara y el cuello se cuentan alrededor de unos treinta músculos. Entrenarlos con ejercicios de estiramientos también es importante.

Salvo para masajearnos la piel y aplicar los cosméticos es importante evitar todo lo posible tocarse la cara si nuestras manos no están limpias, porque le estaremos aportando suciedad y bacterias que no le hacen ningún favor.

Previous

Rossy de Palma protagoniza la campaña de la colección diseñada por Miranda Makaroff para Desigual

“Nuevo año. Nuevas rebajas”, El Corte Inglés inicia las rebajas con esperanza de que 2021 sea mucho mejor

Next