La diseñadora Kyung Bae de Singapur ha lanzado una línea de collares para el cuerpo a modo de denuncia contra los estándares irreales de belleza que la sociedad impone.
Entre ellos, los absurdos retos que inundan instagram como: #A4Challenge el cual consiste en que tu cintura quepa en un folio, el peligroso #PlumpLips para unos labios más voluminosos o el #BikiniBridge.
La colección cuyo hastag corre a cuenta de #thighgap, trata de piezas especializadas para aquellas mujeres que poseen un físico con el que con los pies juntos, siguen manteniendo un hueco entre los muslos. De ahí proviene el término de la colección Tigh Gap Jewellery.
Una moda que se remonta al año 2013 y que es un tanto peligrosa por invitar a un canon corporal poco saludable.
Si os metéis en la web para adquirir alguno de estos accesorios, el mensaje que sale en la pantalla de tu ordenador al intentar pagarlo es toda una declaración de intenciones: “TGap es una compañía de joyería ficticia que vende joyas para Thigh Gaps. Se puso en marcha para impulsar el debate sobre las imágenes corporales irreales que muestran los medios de comunicación social”.
Su precio oscila entre los $175 y los $195 pero en el fondo es todo una tapadera ya que como podéis comprobar, los accesorios no se pueden comprar.
El objetivo de su creación está más que claro, y la diseñadora manifiesta abiertamente en su web la indignación de que 8 de cada 10 personas se hayan convencido a través de las redes sociales, de que su cuerpo no es el adecuado adoptando como “tendencia” ideales poco realistas.
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