¿Bótox o Ácido hialurónico? Retoques estéticos sin dolor y múltiples beneficios

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¿Papá Noel o los Reyes Magos? ¿Árbol o Portal de Belén? ¿Sidra o Cava? Roscón, ¿con o sin nata? La Navidad es una época de eternos debates pero, en el mundo de la estética, ya no es necesario decantarse por uno u otro bando.

Los centros de referencia Cristina Álvarez han diseñado un tratamiento exclusivo que combina los efectos del bótox para favorecer un rostro descansado, sin arrugas ni líneas de expresión, junto con el efecto de relleno que producen las infiltraciones de ácido hialurónico. De este modo, se puede personalizar al máximo el tratamiento para conseguir, de forma visible, resultados mucho más eficaces y naturales.

Estos retoques estéticos, que tienen la ventaja de ser mínimamente invasivos e indoloros, tienen un efecto flash y sus resultados se notan de forma inmediata. Por este motivo, cada vez es más habitual realizarse un retoque antes de las grandes citas navideñas. “En estas fechas se multiplican los planes y todos queremos mostrar nuestra mejor versión. Es lo que nos ha impulsado a crear un tratamiento exclusivo con resultados rápidos, visibles pero, sobre todo, personalizado”, apunta Cristina Álvarez, cofundadora y directora del departamento I+D de Centros Cristina Álvarez.

¿Rellenar o alisar?

A partir de los 25 años, empieza a disminuir la producción de colágeno en la piel. Esto conlleva la pérdida de firmeza y flexibilidad y conlleva la aparición de arrugas de expresión en entrecejo, frente o contorno de ojos. El bótox o toxina botulínica inhibe la contracción muscular y permite difuminar las arrugas y prevenir su aparición. “Este tratamiento se solía usar para contrarrestar los efectos del paso del tiempo pero, cada vez más, lo administramos con efecto preventivo, relajando el músculo para retrasar el envejecimiento facial”, indica Carmen Mérida, directora técnica de Cristina Álvarez.

Por su parte, el ácido hialurónico es una sustancia que el cuerpo crea de manera natural pero a partir de los 25 años su producción se reduce y la piel pierde hidratación y firmeza. El ácido hialurónico menos reticulado hidrata el rostro mientras que el reticulado, que se presenta en distintas densidades, se aplica para rellenar arrugas y dar volumen a labios o pómulos. De esta forma se puede elegir el más adecuado dependiendo de las características y necesidades de la piel.

Usar las dos sustancias de manera conjunta, permite conseguir resultados mucho más efectivos para devolver a la piel un aspecto jugoso, hidratado y saludable con el que brillar en Navidad. El tratamiento combinado de bótox y ácido hialurónico está disponible por tiempo limitado a un precio especial en los centros médico estéticos Cristina Álvarez, ubicados en las madrileñas calles de Ayala y Potosí.

 

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